La PNL establece una serie de premisas que ayudan a comprender el mundo y vivir mejor en él.
Cada persona percibe su existencia y lo que en ella le acontece de una manera completamente diferente a como lo hacen los demás. Dependiendo de su educación y experiencias vividas, es decir, su historia.
El ejemplo más claro de ello es que cualquier acontecimiento que sucede, cada persona que lo vive lo asimila de una manera diferente. Si cuatro individuos contemplan un accidente de coche, cada uno puede relatar una versión muy distinta de lo que allí ha ocurrido.
No puedo no comunicarme. Si dos personas coinciden al mismo tiempo en el mismo lugar no pueden no comunicarse; aunque no hablen, su cuerpo está enviando una serie de información que el receptor está captando y viceversa. (Comunicación no verbal: Gestos, postura, imagen, forma de vestir).
El resultado de una buena comunicación es la respuesta que obtenemos. En muchas ocasiones consideramos que si la gente no nos ha entendido es porque tiene algún problema, en vez de mirar hacia nuestro interior y comprobar que la dificultad está nosotros. Debemos entonces de modificar nuestro discurso para que el mensaje llegue de forma correcta.
No hay fracaso, sólo retroalimentación. En la PNL la palabra fracaso no existe. Tiene demasiada carga negativa para el cerebro. Es mejor hablar de resultado y así se considera a la respuesta que llega desde el receptor. Dice la PNL que la vida no es lo que nos pasa sino lo que creemos que nos pasa. Las experiencias que transcurren pueden ser contempladas como positivas o negativas dependiendo del espíritu que se tenga. Una frase conocida también en el ámbito de la PNL es la siguiente: Si siempre haces lo mismo y obtienes el mismo resultado, ¿por qué no tratas de hacer algo diferente?
Estamos dotados de todos los recursos. Dice la PNL que todas las personas tienen recursos para hacer cualquier cosa, el reto es descubrirlos. La famosa frase de querer es poder es aquí muy conveniente porque de eso se trata. Hay miles de ejemplos en el mundo de personas que han superado todo tipo de discapacidades e impedimentos para llegar a donde están. Por muy difíciles que puedan parecer los retos, se consiguen si uno lucha lo suficiente por ellos.
Si una persona puede hacerlo, yo puedo hacerlo. Es una premisa básica de la PNL y, de hecho, gran parte de esta ciencia está basada en que se puede modelar, es decir, copiar la estrategia de una persona que triunfa en algún campo a fin de ser tan bueno como ella.